La producción dramática de Valle Inclán se considera como una de la más extraordinaria aventura del teatro europeo contemporáneo.
Sus obras se agrupan en ciclos, los cuales se desarrollan de manera concéntrica y paralela.
1. Ciclo Modernista
Estas obras iniciales se basan en un esteticismo al margen de la realidad; de aquí el autor saldrá por el camino del mito y la farsa.
Cenizas (1899), Tragedia de ensueño (1903) y Comedia de ensueño (1905) entre otras.
2. Ciclo Mítico
Partiendo de una idea de Galicia, construirá una imagen del hombre y del mundo mítico e intemporal.
El destino de los personajes se rige por fuerzas elementales como el mal, la violencia, la avaricia y la lujuria. En este teatro se plasma un mundo liberado de lo ideológico.Se situa cerca de la obra de Shakespeare.
3. Ciclo Esperpéntico
Consiste en la deformación grotesca de la realidad, la cual podría interpretarse como una realidad imperfecta. Se consigue a través de un lenguaje muy peculiar en el cual se mezclan registros muy populares con metáforas audaces, produciendo en el espectador una mezcla de risa, horror y perplejidad.
La técnica del esperpento no es totalmente nueva. Existe con anterioridad en obras tanto literarias como artísticas: Guernica de Picasso; Viridiana de Buñuel. También existen movimientos de este tipo en Alemania, Francia e Italia, siendo así una tradición universal.
4. Síntesis Final
Constituye un punto de encuentro, presencia de lo irracional e instintivo.
Esta formado por cuatro obras breves que se incluyen, junto con El embrujado, en el Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte.
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