La Generación del 27, que recibe el nombre de Generación de Plata, termino que acuñó J.C. Mainer, hace referencia al conjunto de escritores que juntaron la tradición literaria Española y las nuevas corrientes vanguardistas que llegaron a Europa y que adaptaron a España.
La fecha referencial de esta generación fue 1927, cuando se conmemoraron los 300 años de la muerte de Góngora. Este primer encuentro tuvo un doble significado: tomaron como modelo el poeta barroco e hicieron un manifiesto en contra del modernismo y la tradición del siglo XIX.
Los rasgos que permitieron clasificarlos dentro del mismo grupo fueron: las fechas de nacimiento cercanas en el tiempo, entre 1891 y 1905; la figura referencial de Luis de Góngora, debido a su perfección formal; la amplia formación literaria, pues trabajaron como profesores dentro o fuera de España; la relación de amistad por encima de ideales políticos o estéticos, puesto que eran un grupo de amigos de la residencia universitaria compuesto inicialmente por Lorca, Buñuel, Dalí y Pepín Bello. Para pertenecer a la generación del 27 era necesario conocer personalmente a los miembros del grupo; los lugares comunes como la residencia de estudiantes en Madrid donde convivieron; las revistas literarias en las que colaboraron; los maestros comunes como Ortega y Gasset del que toman la renovación estética y Juan Ramón Jiménez del que toman su poesía pura; y las antologías, en las que cada escritor preparó un prefacio sobre su propia idea de poesía.
Las características comunes, ademas de ciertos gustos, influencias e intereses, son: Gustos estéticos similares, como el interés por la belleza estética, la naturaleza humana y la mezcla de lo culto y popular; Influencias literarias dispares recogidas de Juan Ramón Jiménez, Unamuno, Antonio Machado, etc; Especial interés por lo popular, asumiendo tanto las tradiciones como las formas de expresión del romancero, los cancioneros o las coplas; Renovación poética buscando un léxico especial y usando la metáfora, el verso libre y los esquemas rítmicos clásicos; Influencia de la vanguardia, acercándose a la corriente surrealista; y la Filiación política, ya que todos los poetas eran de izquierdas, lo que supuso su persecución y la vinculación desde ese momento de los intelectuales con la izquierda.
Los temas empleados eran: la ciudad que representaba el progreso, utilizando como símbolos Moscú y Nueva York; la naturaleza, la cual acercan a la ciudad y al mundo cotidiano; el amor, ligado a la idea de la naturaleza humana y al individuo; y el compromiso con su tiempo, puesto que durante la Guerra Civil y después de ella, muchos escritores afrontaron el tema desde diferentes perspectivas.
La crítica literaria ha señalado tres etapas: La inicial (hasta 1929)en la que los autores se sitúan entre el influjo de la lírica popular y la poesía tradicional y la admiración por los clásicos, cultivando además la poesía pura de Juan Ramón Jiménez; seguidamente viene la etapa de Antes de la guerra civil (1929-1936) que se caracteriza por la influencia de la corriente del surrealismo de la que se incorporan el uso de imágenes, metáforas y el inconsciente; finalizando con la etapa de Después de la Guerra Civil (a partir de 1939) en la que como resultado de la guerra hubo un doble exilio por parte de los miembros de la Generación del 27, exterior, debido a que unos se exiliaron olvidándose de España, o interior, ya que lo que se quedaron en España dejaron de escribir para ser únicamente profesores
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